2013/09/19

8167.- Valor en el Camino de Santiago


Margarita empezó el Camino de Santiago para reclamar un puente nuevo que evite accidentes en la esclusa número 13 del Canal de Castilla como el que causó la muerte de su hijo. 
Hace poco más de un año que su hijo falleció en un accidente de tráfico registrado a la altura de la esclusa número 13 del Canal de Castilla. En la madrugada del sábado 11 de agosto de 2012, seis personas perdieron la vida en un siniestro en Naveros de Pisuerga (Palencia) cuando el vehículo cayó al agua, suceso en el que perdieron la vida dos mujeres de 37 y 36 años, una joven de 18, otra de 15 y dos menores de 12 y seis años. 

Margarita Arroyo realizaba todos los años el Camino de Santiago con sus hijos, rutina que no ha roto en esta ocasión, pero no en el mes de junio, como estaba previsto, sino que ha esperado a que se cumpliera el primer aniversario del accidente ya que “emocionalmente no estaba bien”. En esta ocasión, y acompañada por Antontxu, el oso de su hijo Ibai, Marga ha hecho parada en León en su camino a Santiago para reclamar puentes nuevos y evitar que se registren más muertos en un punto en el que ya ha habido que lamentar esta situación en dos ocasiones. 

La petición que está llevando a esta vasca hasta la capital gallega es conseguir la construcción de “un puente seguro” que, si bien cumple con las medidas de seguridad, es un “peligro” para los vehículos que circulan por esa zona. 

Las deficiencias que se estima que afectan al puente de esta carretera secundaria es una “dejadez” que se traduce en mala señalización, mala iluminación, falta de balizamiento o mal estado del vallado, que fue la causa del accidente. Margarita recuerda que es un puente con una curvatura de 90 grados que impide ver el canal con claridad y “cuando llegas te caes”. Reconoce que “hoy por hoy el accidente no hubiera pasado” por el estado de la valla, que hace un año “no aguantó”. Tampoco el estado del firme es el adecuado, ya que el paso de vehículos agrícolas provoca que las piedras estén “quitadas”. 

Son ya dos los accidentes registrados en ese mismo punto y que se produjera un tercero sería “un disgusto muy grande”. De ahí esta iniciativa que dio comienzo el pasado día 1 de septiembre y que inicialmente está previsto que concluya en Santiago de Compostela el día 26. En todo este tiempo, Marga Arroyo está viviendo un momento “emocionalmente muy fuerte”, dado que el recorrido “es el mismo que había hecho con mis hijos”, incluso intenta pasar la noche en los mismos albergues que lo hizo el año pasado porque “era la primera vez que mi hijo hacía el camino”. 

Y aunque el estado emocional y la muerte de un hijo “no da fuerza”, sí está recibiendo numerosos apoyos de peregrinos y de gente anónima, que acompañan esta causa a través del blog www.ibaisiguetucamino.com, donde se reciben muestras de apoyo continuas, y donde se explica también el porqué de esta iniciativa así como se relata el día a día de cada jornada en la que el objetivo es el mismo, pedir un puente “seguro” que evite más muertes como la de Ibai.