Ante la muy triste noticia que nos llega desde Caracas sobre el adoctrinamiento de milicias integradas por niños de las barriadas de la Capital, merece la pena preguntarse sobre la responsabilidad de esta monstruosidad social.
- Quien es responsable de este desafuero, universalmente condenable y condenado? Un hombre? Un funcionario? Un grupo de personas al margen de la Ley? Una fracción política? Una parcialidad doctrinaria? Unas Leyes permisivas?
- Que estamos preparando? a.- Barreras humanas? b.-Carne de cañón? c.-Bandas armadas?
- Serán estos los únicos niños que se están adoctrinando? Habrán otros grupos en el país? Habrán otros grupos de niños venezolanos adoctrinándose en el exterior? Estaremos adoctrinando a niños de otros países como resultado de convenios desconocidos por los venezolanos de a pie?
- Al momento en que se produzca la primera balacera y alguno de ellos caiga, en aras de la Doctrina, quien pagará por esa muerte? Los “lideres” o solo los niños?
- Al momento en que se produzca la primera balacera y alguno de ellos, con su adiestramiento, cause heridos o muertos, quien pagará por esas heridas y/o muertes? Los “lideres” o los niños?
- Cuanto vale cada combatiente para sus “Lideres”? a.-En valor social?, b.-en valor político?, c.-en dinero?
- Cual es la relación de valor entre los lideres y estos niños? Cuantos “lideres” por niño? Cuantos “lideres” llenaran el vacío que deje uno solo de estos niños?
- Hasta donde se extiende la responsabilidad por la toma de decisiones en cuanto a estos niños se refiere? Solo hasta los figurones del periódico? Hasta los Ministerios del poder ejecutivo? Hasta la Asamblea Nacional? Hasta los Poderes Públicos? Hasta los medios de comunicación por su información o desinformación sobre el tema? Hasta los lideres religiosos en el país? Hasta la Internacional Socialista? Hasta la comunidad internacional? Hasta la ONU?
- Que pito toca la Ley de Protección al menor y al adolescente? Son, o no, reos ante esta Ley, todos los responsables nacionales de este hecho, mostrado con gran despliegue y “orgullo” por sus actores?
Son muchas las preguntas de todo orden que se derivan de esta monstruosidad, ni que decir del traumatismo social a futuro; si algo debe considerarse a fondo en estos momentos de crisis, es la formación de nuestras juventudes, única posibilidad social del país. Vamos a cumplir 100 años copiando modelos políticos del exterior que hasta ahora solo han demostrado que ninguno de ellos ha sido correcto para nosotros. Vivimos gritando “soberanía” y solo copiamos basura, la que sirve a nuestras muy pobres miras, carentes de sentido nacional.
Si nosotros somos el pasado y ellos, los niños, el presente y el futuro, no tenemos derecho a limitar sus posibilidades escondiéndonos tras la excusa de la necesidad (para nuestros partidos políticos) de prepararlos ahora, que no han madurado, porque si se deja para después van, seguramente, a despreciar nuestra oferta.