2016/02/07

263575.- Compromiso Politico...

Sobredosis

El Gobierno sabe que puede contar con los partidos para un compromiso de gobernabilidad

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CARLOS RAÚL HERNÁNDEZ | EL UNIVERSAL
domingo 7 de febrero de 2016 12:00 AM
Venezuela parará en seco "el proceso" del Estado fallido, aunque hoy sufrimos sus efectos. Sartre escribió una vez que, en general, cuando líderes o aspirantes a serlo disertaban sobre el dramatismo de las circunstancias y los riesgos larvados, el interlocutor se cuidaba de aclarar algo al final del discurso: que esos males se materializarían inevitablemente, a menos que se hiciera lo que, a continuación, el expositor planteaba. Y se largaba con la propuesta salvadora. Pero en el caso actual no se trata de tomar medidas para prevenir la llegada del huracán, sino que estamos dentro de él, pero se van a controlar daños y superarlos al menor costo posible. Según los creadores del concepto, en los casos fallidos, el Estado legítimo sufre una pérdida progresiva de capacidad para garantizar la soberanía del territorio y el monopolio institucional de las armas y grupos irregulares pasan a compartir estas funciones.

Según Freedom House en Venezuela, bandas criminales, "violencia política y una corrupción sistemática son riesgos crecientes" para la democracia. Y en el techo de la cárcel de San Antonio en Margarita, acampaba un batallón de presidiarios artillados que presentaron respetos de guerra a un colega caído heroicamente en la puerta de una discoteca. Igual el toque de queda impuesto en Maracay en días pasados por grupos armados de Aragua, Carabobo y Guárico, como luto por la baja de un delincuente a manos de las autoridades. Frente a estas realidades los factores de poder actuarán para impedir el colapso de la vida civilizada y no permitirán semejante perspectiva. Pero inquieta por qué el Gobierno quema una tras otra las posibilidades de rectificar en una secuencia de pie quebrados y actos fallidos.

No medidas aisladas

Batea flaicitos en el cuadro, con una ingenuidad no apta para mayores de edad. No cepillarse los dientes tres veces al día, no gastar más de cinco pares de zapatos al año, apretar bien los controles de precios, enviar al Sebin, no enfermarse ni comer tanto, no importar "carne muerta" sino ganado en pie. Y pincharle los ojos a los gringos o sembrar cebollín en las ventanas. Parecen chistes de velorio frente al cadáver, cuando la oleada hiperinflacionaria de 900% en alimentos diezma a los pobres. El déficit fiscal puede llegar a 40%, y caída del producto a -15% o más, los tres indicadores, los peores del mundo. Escasez de 70%, ni más ni menos la economía europea después de la II Guerra Mundial a lo que el Vice en alarde de humor, afirma que aún no han construido el socialismo. Bank of América y la empresa nipona Nomurasugieren que permitir deslizar los precios -gasolina, arroz, café, harina- es simplemente reconocer la inflación sin hacer nada para corregirla.

Es dejar que se profundice, sus efectos sean mayores, igual que las consecuencias a mediano plazo. Un importante empresario nacional recomendó recientemente algunas acciones de emergencia, una idea positiva mientras un próximo gabinete de grandes ligas inicie programa de reformas estructurales económicas, sociales y políticas de una estrategia de desarrollo. La incógnita es por qué el Gobierno se resiste a lo que todo el mundo en sentido estricto, fuera y dentro, sabios e ignorantes, incluso su propia gente, le dice que haga. Esa resistencia cognoscitiva, -terquedad- conduce a divagar sobre leyendas, como la explosión social y otras, equivalentes urbanos de las narraciones folclóricas sobre la Sayona, el Silbón, la Bola de fuego, etc. Quienes han estudiado con cuidado el asunto saben que lo único que ocasiona esos actos de anarquía colectiva, esos levantamientos masivos, riots, es la falta de respuesta disuasiva en las primeras de cambio.

El apagón

Tantas veces se ha dicho: el 27 de febrero de 1989 la Policía Metropolitana de Caracas estaba en huelga y no actuó al inicio del incendio social. Pero existe una circunstancia especial, una sola, a la que hay que temer: las fallas eléctricas, como las de NY que en dos fechas ocasionaron fenómenos de esta índole. Es seguro que las FF.AA saben las consecuencias posibles de un apagón y la necesidad de prevenir cualquier incidencia que pudiera una siniestra situación con terribles pérdidas de vidas, ruptura del orden público y de la seguridad del Estado. Está en primer lugar la Asamblea Nacional, una institución con prestigio y legitimidad flamantes, dispuesta a hacer cumplir la Constitución en cualquier circunstancia, hacer respetar los DD.HH y respaldar la estabilidad institucional.

El Gobierno sabe que puede contar con los partidos y la sociedad civil para un compromiso de gobernabilidad y evitar lo que en las Revelaciones se denomina el día de la bestia, y es el único que se niega. Empresarios, políticos, opinion makers, periodistas lo repiten permanentemente y hay que insistir, así como habría que hacer una campaña sistemática, abarcadora, densa, amplia, sobre la importancia de otorgar la propiedad a quienes viven "arrimados" en viviendas gubernamentales. Ambas propuestas tienen mucha más trascendencia que las que se hagan con el cuchillo entre los dientes, que no entusiasman más que a los ya entusiasmados. El Gobierno sigue la ruta que él mismo se trazó y en este caso es muy poco el valor agregado que confiere una sobredosis de voluntad. 

263574.- Union Europea

Referendo sobre salida británica

hace temblar a UE

Separación de Londres y Bruselas debilitaría su comercio bilateral

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El primer ministro de Reino Unido, David Cameron negocia con sus colegas europeos las reformas para defender la permanencia británica en la UE AP   
LUIS MENDOZA |  EL UNIVERSAL domingo 7 de febrero de 2016  12:00 AM
El primer ministro británico, David Cameron, inició esta semana una ronda de negociaciones con sus colegas europeos que serán clave para aupar o evitar la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE), o "brexit", de cara a un referendo que aún sin fecha ha puesto a temblar a los otros 27 países que conforman el bloque.

Consciente de lo que representa su nación para la UE, Cameron propone una serie de reformas, que a su juicio llevarán a Reino Unido a ser un país más "prospero" e "influyente", donde destacan puntos claves como la competitividad de mercado, la integración europea, el acceso al mercado único de los países que no están en el euro y la inmigración, siendo este último el asunto más espinoso por tratar de establecer un "freno de emergencia" a los servicios sociales para los ciudadanos comunitarios, quienes deberán residir primero cuatro años en Reino Unido antes de poder beneficiarse de ellos, algo que va en contra del derecho a la libre circulación que defiende el bloque europeo.

La alarma que encendió la hipotética "brexit" logró una respuesta positiva de la UE hacia las exigencias británicas, algo que se vio reflejado tras la entrega de un borrador con la contrapropuesta europea que el propio Cameron calificó de "verdadero progreso".

Dicho texto, entregado en Bruselas por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, incluye el "freno" a los beneficios sociales a los trabajadores comunitarios que exige Reino Unido, siempre que los países comunitarios demuestren que sus servicios públicos, como escuelas y hospitales, sufren una carga imposible de asumir por el aumento de la inmigración.

Este avance permitirá a Cameron conseguir el acuerdo en la cumbre de la UE, de los próximos 18 y 19 de febrero en Bruselas, antes de convocar el referendo en el que él mismo ha reiterado apoyaría el "No" a la salida, de lograr un pacto que beneficie a ambas partes.

Malo para todos

El pasado mes de mayo, el conservador premier británico utilizó como bandera de campaña para su reelección el llevar a cabo el referendo sobre la permanencia de su país en la UE, lo que le valió conseguir una mayoría absoluta que para entonces todas las encuestas auguraban era imposible de conseguir.

Sin embargo, y pese a no estar claro en qué circunstancias se daría la "brexit", el rompimiento de Londres y la UE es una de esas "situaciones en las que ninguna de las dos partes deberían tener un incentivo claro para que se diera este resultado", asegura el politólogo de la Universidad de Oxford Ignacio Jurado.

El analista estima que en esta situación "tiene más que perder Londres que no deja de ser un solo país, mientras que los otros 27 pueden seguir operando entre ellos, aunque no deja de ser cierto que sería la pérdida de un actor económico fundamental dentro de la UE".

En este sentido, el especialista advierte que tras la desconexión, y dependiendo la forma en que se lleve a cabo, se podría debilitar un "motor fundamental para ambas partes" como lo es el comercio entre Reino Unido y el resto de la UE.

De hecho, dentro del seno del bloque comunitario el sentir es que la separación con Reino Unido asestaría un "duro golpe" a la UE, como lo afirmó el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble, en declaraciones al diario alemán Rhein-Neckar-Zeitung.

La salida es posible

Pese a ello, la temida "brexit" sigue siendo posible debido al llamado a un referendo que no garantiza nada para ninguna de las dos partes.

"La salida puede ocurrir porque habrá un referendo, y estas consultas como tales tienen un cierto margen de impredecibilidad", indica el politólogo, haciendo alusión a la consulta sobre la independencia de Escocia donde el "Sí" parecía el claro perdedor de la contienda y al final quedo muy cerca de resultar vencedor.

Por esta razón, el especialista apuesta a que tanto Londres como Bruselas conseguirán un acuerdo que beneficie a ambas partes y el premier pueda mostrarse con "dignidad" ante su electorado para convocar el referendo, que probablemente se celebre a mediados de junio, y defender el "No" a la salida.

El líder conservador "sabe que el poder económico británico está en contra de la salida. Y a pesar de que tenía demandas en teoría muy firmes, los últimos acuerdos están lejos de aquello que él prometía exigir para defender la permanencia de Reino Unido, por lo que ya está diciendo que eso está dentro del margen de acuerdos posible y estaría dispuesto a aceptarlo".

No obstante, el mayor riesgo radica en una población británica que tiene muy asentado el sentimiento antieuropeísta y la salida de la UE se pide desde hace mucho tiempo.

Jurado, quien reside en Reino Unido desde hace varios años, hace mención a las regiones británicas en las que reside el sector de menor ingreso económico del país, donde el grueso de la población siente que los extranjeros europeos "vienen a quitarles sus puesto de trabajos".

Las palabras del politólogo coinciden con la encuesta hecho por la firma YouGoy para el diario The Times, publicada el viernes, donde se muestra que el apoyo de los británicos a la "brexit" ha aumentado y alcanza el 45%, una diferencia de nueve puntos frente a los que votarán por quedarse en el bloque europeo.