La expresión “balconeando” la escuché hace muchos años cuando Doña Alicia y Don Miguel, mediante aquel magnifico Viking 500, se comunicaban con otros radioaficionados utilizando las inolvidables siglas de YV2BG y YV2BH, Boston Granada y Boston Holanda. Balconear significaba salir al aire y establecer comunicación con otros radioaficionados conocidos y desconocidos, reportar la señal que recibían, interesarse por las familias, compartir… No se diferenciaba en mucho del actual concepto de utilización de las redes sociales en Internet en cuanto al “Que” pero si en cuanto al “Como”.
Los contactos se caracterizaban por una extraordinaria corrección en forma y en fondo, no existían malas palabras y los temas siempre eran del mas puro consumo familiar tratando siempre de incrementar el conocimiento y las buenas costumbres. Las campañas de apoyo para algún tipo de necesidad o para encontrar familiares de alguien o para encomendar a viajeros o para buscar productos o asistencia de cualquier índole estaban a la orden del día y por lo general se obtenía lo que se buscaba. Era una labor social de alto grado.
Como en todas las conversaciones en todas partes del mundo, se daba credibilidad instantánea al interlocutor en la base de que en todas partes se tenia el mismo, o al menos un, código de buenas costumbres, responsabilidad y decencia. Otras eran las costumbres y otros los momentos. El calor de la voz le daba el matiz de vida a la comunicación, diferente a lo de nuestros tiempos actuales en donde las redes sociales generalmente no tienen frenos en cuanto a esas características. Cuidabanse mucho los Radioaficionados de expresar conceptos que generaran disputas y controversias y para eso se preparaban sobre los temas que pensaban tocar. Era en vivo y había que mantener la conversación y había que darle valor a la palabra.
Que distinto a los tiempos actuales, muchos de nosotros, integrantes de la raza humana, tenemos acceso a la tecnología y a la información… y sin limites, excepto los que mínimamente se establecen algunas sociedades. Ya es un punto de honor el poder decir o escribir lo que se quiera, sin cortapisas de ningún tipo. El derecho de autor se respeta muy poco, sobre todo cuando los autores ya están al lado del Señor y sus deudos no tienen la menor idea del escrito. A veces cuando tomamos de la red algún escrito pecamos de inocentes y lo relanzamos casi sin averiguar si la fuente es valida o no, o mejor dicho, si la fuente que generalmente es confiable también lo es en ese preciso momento. Se da uno golpes por confiado.
Una queja actual de maestros y profesores es que los alumnos utilizan la red informática para copiar soluciones, sin estudiar realmente. Muchas son las discusiones sobre este aspecto. Personalmente creo que lo que tenemos frente a nosotros es una prodigiosa oportunidad para propiciar la investigación. Creo que un ejemplo nos puede mostrar mejor el cuadro:
Situación estudiada: La injusticia social. Se le pide al alumno que escriba un documento de 300 palabras describiéndola.
Actividad del alumno: Ingresa en la WEB y coloca el titulo: La injusticia social, utiliza el buscador…
Utilizando Google me aparece: Cerca de 10.600.000 resultados (0,26 segundos)
Cual escojo entre 10.600.000 resultados? De tin marín de do pingüe… y copiar y pegar… la razón para los que opinan que somos unos perezosos…
Pero que sucede si lo que se le pide es que copie el documento que quiera y que explique “en sus propias palabras” porque escoge ese documento? Ya la repuesta deja de ser obvia…
Y si se le pide que escoja un documento radical, que explique porque lo considera de esa forma, detalles sobre el autor de ese documento, razonamientos sobre los porque de cada uno de los detalles… que contraste ese documento con uno sobre el mismo tema pero de otro autor no radical, o de la tendencia J o de la Y, que los compare entre ellos, sin que se note la tendencia del propio alumno? Que analice las fuentes de esa pagina.
Se nos abre un mundo de posibilidades… le damos oportunidad al alumno… le motivamos a la investigación… la razón para los que opinan que no debemos perder la fe…