2014/03/31

8376.- Su patria o la mía?

La noticia nos habla de la marcha en la capital de las 13.500 "unidades de batalla" del gobierno y nos indica que no llenaron ni cuatro cuadras a pesar de que venían de "todo el país". Hubo, las palabras de rigor para arengar a la multitud.
El gobernador de Anzoátegui, Aristóbulo Istúriz, entre otras "frases" dijo: 
“Ante la confrontación, o ellos o nosotros. Ellos se han alzado, abusan de la tolerancia de Maduro y del pueblo. ¡Contamos hasta 10, luego hasta 100; pero al llegar a 1.000 no respondo! No vamos a permitir que nos hagan la vida imposible. ¡No queremos guerra civil, pero no nos calienten!”.

Confesado el delito, relevadas las pruebas...
Se observa en esta frase la tradición académica del gobernador Istúriz, dejando caer la palabra como al sesgo, como si nada... para no comprometerse... y, la verdad es que no se si ha sido el primero que la ha mencionado públicamente... pero, ya está hecho, ya lo dijo, ya pasa a la mala historia como el funcionario a quien se le fue la lengua en un arrebato y anunció, evidenció, lo que para todos era una realidad... aceptó que para el gobierno es valida esa solución y, dados sus modales, no es aventurado esperar a que se convierta en el vidente, el gurú, de la GUERRA CIVIL ....Ahora nos explicamos la traída de las tropas cubanas y la necesidad de los francotiradores que ya en anteriores ocasiones les han sido tan útiles y que les obligan a mantener preso a SIMONOVIS. Pero se le ha olvidado que los venezolanos hemos aprendido de las escaramuzas que hemos tenido desde siempre y, con singular relevancia, que los NO ALIENADOS, NO NOS ALIMENTAMOS con sueños de vida sin trabajo. La singular "guerra" de los sesenta nos enseñó que hacer, como hacerlo y cuando hacerlo... si en aquella época las leyes, nuestras compañeras, no nos permitían llegar hasta algunos limites, y aún así se acabó con las guerrillas y con la invasión cubana, ahora, sin esas cortapisas, sería mucho mas fácil llegar hasta el mismo centro del odio. El resultado es sumamente fácil de calcular en números... pasaríamos de los seis enteros al hablar de bajas, hablaríamos, en tono de empleados bancarios, de siete cifras bajas.
Ahora se entiende la urgencia para el ejecutivo de traerse a los cubanos, de aliarse con la guerrilla colombiana, de endeudarse hasta los ojos con los chinos, endeudarse con los rusos, con los brasileros, buscar la rodilla en tierra de la OEA, etc,.
Trece líneas que ponen al cerebro a hervir con su contenido y un "maestro" el que las origina en la vorágine de la oratoria política y politiquera.
Traicionar al que traiciona, que traiciona al que traiciona, que traiciona al que traiciona, etc. Esa consigna que de un tiempo a esta parte se ha hecho sentir en mi patria, que no se si es la suya, o la suya, o la suya. Al final es una patria desangrada, adolorida y clara en saber quienes son los culpables.

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