Una pregunta demasiado importante

Recién termino de leer una comunicación del Club de la Efectividad, al cual me honro en pertenecer, realmente me gusta la idea y la forma de expresarla.  Quiero compartirla con ustedes, amables amig@s porque es algo de lo que estamos llenos en el cada día de nuestra vida actual. Siempre mirando hacia adelante y siempre eludiendo el compromiso, siempre buscando en otros el porqué. Como presiento que les gustará y que tendrán sed de recibir otros por el estilo, http://www.efectividad.net/ es una de las direcciones para saciar esa sed.

Pensemos en el año que viene, en nuestro lugar en el mundo del 2010 porque:

“El mundo está lleno de buenas ideas, pero sin un compromiso apasionado valen poco y no llegan a ninguna parte. Las buenas ideas sin pasión representan una carga: consumen nuestro precioso tiempo y -además- sugieren que alguien (usualmente el anónimo “ellos”) debería hacerse responsable. Pero el asunto es... que “ellos” no existen! Nada se hará hasta que Yo, Tu, y Nosotros, nos hagamos cargo.”

“Creemos que las personas tienen las soluciones a los problemas que confrontan. La tecnología no es la solución, pero puede ayudar. Nosotros somos la solución. No aisladamente, sino conectándonos verdaderamente unos con otros. Las circunstancias en las que se crea esta conexión poco importan. Aún en los peores desastres, quienes trabajan codo a codo, recuerdan sus conexiones como "memorables".”

“Y para esto tenemos que bajar la velocidad. Nada cambiará para mejor hasta que lo hagamos. Necesitamos tiempo para pensar, para aprender, para conocernos y conectarnos. Hemos perdido estas grandes capacidades humanas en la velocidad de la vida moderna y es hora de recuperarlas.”

“La cura para la desesperación no es la esperanza, sino descubrir qué nos importa y hacer algo al respecto. Justamente por eso existe este Club: para ayudarte a bajar la velocidad, a pensar, a aprender, a sentir, a conocerte y conocer a otros... y a ponerte en acción! Así que para este fin de año, decidimos regalarte esta pregunta:

¿Qué te importa, y qué harás al respecto?”

“Gracias por este tiempo compartido... y muchísimas felicidades!”

Uno nunca llega tan lejos, como cuando no sabe adonde se dirige.
-Johann Wolfgang von Goethe-